All those moments, will be lost in time like tears in rain…

Pessoa escribía en el Libro del desasosiego: “Encuentro a veces, en la confusión vacía de mis gavetas literarias, papeles escritos por mí hace diez años, hace quince años, hace quizá más años. Y muchos de ellos me parecen de un extraño; me desreconozco en ellos. Hubo quien los escribió, y fui yo. Los sentí yo, pero fue como en otra vida, de la que hubiese despertado como de un sueño ajeno”.  Esta página recoge entradas en forma de notas que desde 2009 funcionaron como un laboratorio de escritura y de devaneos a partir de libros, películas, pensamientos… Notas que sentí, pero como en otra vida.

Max Martins en la Universidad de Coímbra


La semana pasada se celebró en la Facultad de Letras de la Universidad de Coímbra un coloquio internacional dedicado al poeta Max Martins (1926-2009, Belém do Pará), organizado por el Instituto de Estudios Brasileños de dicha institución. Como consta en el resumen del encuentro, “con un primer libro publicado en 1952, O Estranho, Max Martins llegaría a afirmarse, de un modo discreto pero persistente, como uno de los poetas brasileños más importantes de la segunda mitad del siglo XX”.

El coloquio contó con la participación de Marcos Siscar, Alva Martínez Teixeiro, André de Aquino, Leila Melo Coroa, Osvaldo Manuel Silvestre, Pedro Serra, Age de Carvalho, Ana Sabino y Eduardo Sterzi, especialistas en la obra del poeta y/o en edición. Así, Siscar, profesor de la UNICAMP (Brasil) y especialista en poesía moderna, inauguró el encuentro con una conferencia titulada “Verdesejante verdizente verdescrito: a ocologia amazônica de Max Martins”, en que analizó la obra del poeta a partir de un marco teórico trazado desde el concepto y la calidad de “hueco” (oco en portugués). Para Siscar, MM hace del hueco un cuerpo del poema.

A continuación, Alva Martínez Teixeiro, profesora de la Universidad de Lisboa (Portugal), ofreció, en una intervención llamada “Os chamados do tigre, desejo e desenho da fera na poesia de Max Martins”, una lectura de la figura del tigre en la obra del poeta en diálogo con la obra de William Blake, entre otros. André de Aquino, doctorado de la UNICAMP, por su parte, con “Um endereço em fuga: a poesia de Max Martins”, realizó una lectura heideggeriana de la obra del poeta, a partir de Benedito Nunes, y se pregunto por las relaciones entre poesía y filosofía y entre naturaleza y cultura. La poesía como casa del ser se abre al acontecimiento entre tierra y mundo. Leila Melo Coroa, también de la UNICAMP, en “Max Martins: um antriretrato”, estudió la obra 60/35 y hablo de la materialidad del libro a partir también de conceptos derridianos como rasura y errancia. Osvaldo Manuel Silvestre, profesor de la Universidad de Coimbra, en “‘Já então é tudo pedra’: Max Martins ou o poema como epitáfio”, hizo una lectura que colocó en paralelo la interpretación heideggeriana de MM con la lectura derridiana. Silvestre trazó un marco a partir de Poetry as Epitaph de Karen Mills-Courts y algunos conceptos de Paul de Man, entre otros autores, para estudiar el poema como túmulo en la obra del poeta paraense. Finalmente, la última sesión del primer día corrió a cargo de Pedro Serra, profesor de la Universidad de Salamanca, que en “T’OURO”, también ofreció su lectura de la obra del poeta belemense, a partir de Boris Groys y de la banalización de la alteridad.

El segundo día del coloquio estuvo marcado por las presentaciones de Age de Carvalho, amigo y editor de Max Martins, de Ana Sabino y de Eduardo Sterzi. Age de Carvalho, poeta y editor, conoció a Max Martins en su juventud en Belém, momento a partir del cual entablaron una amistad que duró hasta el fallecimiento del poeta. Carvalho, en una charla llamada “A fala entre parêntesis”, analizó el libro y el estudio fotográfico que Ronaldo Moraes Rêgo realizó para los poetas entre el 13 y 14 de noviembre de 1981 en la autopista Mosqueiro en Pará. Carvalho revisitó “A fala entre paréntesis” para hablar del proceso creativo que se inspiró en el renga japonés, un arte de escrita compartida que pretende dialogar con el talento del otro. A continuación, Ana Sabino, de la Universidad de Oporto, analizó la composición gráfica de la colección de poemarios de Max Martins, editada por Age de Carvalho para la Editorial de la Universidad Federal de Pará. Finalmente, el coloquio terminó de forma excelente con una conferencia de Eduardo Sterzi titulada “A fala (de novo) entre parêntesis”, en que el profesor de la UNICAMP habló de la dialéctica de la creación del poeta y reconoció con admiración el trabajo editorial de Age de Carvalho en homenaje a la escritura y la memoria de su amigo.

Descubrí a Max Martins a través de André de Aquino y de Leila Melo Coroa, estudiantes brasileros de intercambio en la Universidad de Coimbra. Max Martins fue también amigo de Benedito Nunes, una amistad que se traduciría en la relación entre poesía y filosofía que recorre la obra del poeta. El trabajo de los doctorados y del coloquio ayudaron a dar a conocer la poesía del escritor entre quienes la desconocíamos. Mi primera impresión fue que la obra de MM es tan polivalente que parce dejarse analizar por diferentes marcos teóricos contemporáneos. En el coloquio fueron utilizados Heidegger, Derrida, Groys, Karen Mills-Courts y Deleuze, entre otros. Personalmente, pensé en Lacan y su lituraterra, el litoral que borda el vacío. La letra como real entre lo singular y lo universal, entre el enunciado y la enunciación, para nombrar lo imposible.

Termino aquí con algunos poemas de los muchos citados en el encuentro que traduje para este post y os invito a descubrir la obra de Max Martins (MM):

A cabana (do livro Para ter Onde ir, 1992)
É preciso dizer-lhe que tua casa é segura
Que há força interior nas vigas do telhado
E que atravessarás o pântano penetrante e etéreo
E que tens uma esteira
E que tua casa não é lugar de ficar
mas de ter de onde se ir

La cabaña
Hay que decirle que tu casa es segura
Que hay fuerza interior en las vigas del tejado
Y que atravesarás el pantano penetrante y etéreo
Y que tienes una estera
Y que tu casa no es lugar para quedarse
sino para tener de dónde irse

1926/1959 (do livro Anti-Retarato, 1960)
Já então é tudo pedra
os dias, os desenganos.
Rios secaram neste rosto, casca
de barro, areia causticante.
E onde outrora o mar
– os olhos – búzios esburacados.

E tudo é duro e seco e oco,
o sexo enlouquecido
O osso agudo
coberto de pó e de silêncios.

Havia uma ferida, a primavera
que já não arde nem desfibra – seca
a flor amarela escura
anêmica impura
– rato no deserto

caveira de pássaro
exposta na planura

1926/1959
Entonces ya todo es piedra
los días, los desengaños.
Ríos han secado en este rostro, cáscara
de barro, arena caustica.
Y donde antes el mar
– los ojos – conchas agujereadas.

Y todo es duro y seco y hueco,
el sexo enloquecido
el hueso afilado
cubierto de polvo y de silencios.

Había una herida, la primavera
que ya no arde ni desgarra – seca
la flor amarilla oscura
anémica impura
– rata en el desierto

calavera de pájaro
expuesta en la llanura

Do livro Fala entre parêntesis, com Age de Carvalho (1982)
Das florestas de Blake aos topos da Ásia
quem, da confusão entre chão e carne
com seu púbis, seu discurso e chamas, QUEM
DEFENDE TEU ROSTO DESTE SUDÁRIO INFERNAL?

Teu nome é Não em cio e som farpados
sinuoso grafito gravado no muro
mudo, contra o tempo Arfa
noturno, o olho do astro na memória

Este é o meu céu: numa bandeira turva
Incendeia seus últimos signos
Te insinua às sombras (que estão nos antros

e subsistem ao gráfico parêntesis:
Flechas ferindo-se no espelho. Reflexos
…………..Dança indefinida

Del libro Fala entre parêntesis
De los bosques de Blake a las cimas de Asia,
¿quién, de la confusión entre suelo y carne,
con su pubis, su discurso y llamas?, ¿QUIÉN
DEFIENDE TU ROSTRO DE ESTE SUDARIO INFERNAL?

Tu nombre es No en celo y sonido astillados,
grafito sinuoso grabado en el muro
mudo, contra el tiempo Arfa
nocturno, el ojo del astro en la memoria

Este es mi cielo: en una bandera turbia
Incendia sus últimos signos,
Te insinúa a las sombras (que están en los antros

y subsisten al gráfico paréntesis:
Flechas hiriéndose en el espejo. Reflejos
…………..Danza indefinida.

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